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CAPÍTULO II

Antonio caminaba por esa calle que tantas veces había mirado desde su entrada, pero que nunca había osado entrar, ya que su sueldo era tan escaso que le alcanzaba con suerte para comprar una caja de fósforos chistosa que vendían en la tienda estilosa de la esquina y no le servía porque no fumaba y para tenerla metida en la cocina y que nadie la viera, ya que vivía solo y nunca lo iban a visitar....no le hacía mucho sentido.

Esta vez era distinto. La vida parecía sonreirle por primera vez. Al fin su trabajo había sido reconocido y la platita se veía venir. Entonces, rompió ese chanchito regalado por su bisabuelo hace millones de años, guardado como una joya invaluable dentro de la caja fuerte escondida detrás del abrigo, en el closet del subterráneo y emprendió camino a comprar todo lo que se le viniera en gana (cosa que nunca hacía, era muy cuidadoso de sus monedas, porque no tenía muchas).

Entró a una tienda en donde vendían ternos. Compró dos, uno negro y uno igual pero con líneas blancas, por si alguna vez lograba juntar tanta plata, que se comenzara a volver mafioso y necesitara ropa ad-hock -pero me falta un sombrero negro, un puro y una rosa-, pensó mientras soltaba una leve sonrisa.

Le habían dado las 2 de la tarde y tenía hambre. Entró a un local de completos y se sentó en la barra.
-un completo grande por favor-
-¿lo quiere con todo?-
-¿por algo se llama completo o no, le tinca? y tráigame un shop también-

Un televisor estaba prendido a su espalda. Un hombre y una mujer veían las noticias. Antonio no tenía ganas, sólo quería descansar sus pies y relajarse mientras se devoraba su completo.

-Oye qué impresionante- le dijo la mujer al hombre.
-Sí, es tan terrible, no puedo entender por qué lo hacen-
-Bueno- le dice ella, -en todo caso no le funcionó mucho el plan a éste señor, mira que más encima dejar a su señora vegetal y él ahí....ay, qué atroz-.
-¿Qué problema podría tener?  Con tanta plata, dueño de una empresa mundial, en el reportaje salía que tenía una familia muy linda...¿qué le puede haber pasado?

Antonio alcanzó a escuchar esa última frase.  Le llamó la atención, no sabía bien por qué. Alguien cambió el canal y puso las noticias de otro. Toño miró la pantalla y vio el titular, eso era lo que estaba comentando esta gente.

Su rostro palideció y sintió que se quedaba sin aliento.

-No puede ser.....-.

(Fin del capítulo II)