
Bue...
Era niñita, estaba como en 8vo básico cuando le dije a mis amigas, con un dejo de vergûenza por lo que pudieran pensar de mí: "parece que quiero probar".
Me miraron asombradas....no podían creer que me atreviera a hacerlo.
Fui al lugar que me habían dicho. Llevaba la dirección anotada en un papel. Entré. Gente de todo tipo, pero
se notaba que plata tenían y que no saldrían de ahí sin lo que habían ido a buscar.
Temerosa, me senté. Esperé. Me llamaron. Tenían exactamente lo que yo quería.
Ya en mi casa, me encerré en el baño. Me miraba en el espejo feliz, parecía como si flotara!...en verdad casi ni se notaba el efecto, pero no podía parar de pensar "ooooh que la raja". Fue ahí, cuando entré en el círculo....
NOOOOOOO, NO NO! se iba el efecto y ahí estaba yo rogándole a mi mamá para que me diera algo de plata, lo necesitaba o me sentía mal! Volvía a aquel lugar por más. Alivio instantáneo.
Estuve así un tiempo, hasta que en verdad me di cuenta que no podía seguir costeándolo. La plata no estiraba. Ya no iba a poder tener la mejor calidad....por qué Dios!
pero aún así lo seguía necesitando.....I wanted moreeeee...I needed moreeeeee......
Ese día, caminé temblorosa por los pasillos. No quería hacerlo, me habían dicho que una vez que se cruzaba esa línea, ya no había vuelta atrás, pero sabía que era la única opción que me quedaba. Llegué, había una gran variedad....cual sería aquella que me haría sentir realmente bien, que pudiera calmar los sudores nocturnos, los temblores, las paranoias, los miedos...y el bolsillo.
Así que lo hice. Elegí a "castaño claro".
Seguí comprando cada vez más seguido, "caoba cobrizo", "castaño elegante", "miel","chocolate" (normal e intenso)....y ayer.........."espresso".
Hoy, decido contar mi historia para ayudar a otros como yo. No caigan en el vicio. Hagan algún deporte, escriban un libro....pero distráiganse. No sean un esclavo de su pelo y repitan junto a mí: la raiz es buena...es buena....es buena........amo mi raiz...
PD: desde hoy, puede dejar su mensaje, ahora habilitado para todo mortal! No es una obligación, sólo si tiene ganas.